Zaragoza es hasta septiembre una de las ciudades PHotoEspaña 2015. En tres espacios emblemáticos se puede ver una buena muestra de lo que es la XVIII edición del Festival Internacional de Fotografía y Artes Visuales (PHE15). La capital aragonesa recoge los trabajos de cinco fotógrafos de la talla de Ángela Bonadies, Tito Caula, Steve Schapiro, Nicolás Muller e Iñaki Bergera. Los accesos son libres y para todos los públicos.
Nicolás Muller
Uno de los espacios que suscita mayor interés por sí mismo es La Lonja, que, ubicada en plena plaza del Pilar entre la basílica, el Ayuntamiento y La Catedral de La Seo, ejerce de foco cultural.
Hasta el 13 de septiembre acoge entre sus paredes las Obras maestras de Nicolás Muller. Las fotografías del húngaro, coetáneo de otros colegas como Robert Capa, con el que coincidió en Francia, recorren su producción al tiempo que muestra al espectador un paseo por la Europa de mediados del siglo XX.
Si Goya fue un cronista de su época no menos lo fue Muller: uno con pinceles y otro con una cámara de fotos. Como el mismo Muller asegura en una de las citas que salpica los paneles entre imagen e imagen de la exposición, “el fotógrafo cuenta con un instrumento para capturar en una fracción de segundo algo que no volverá”. Con ese lema por bandera, muestra detalles de su paso por Hungría, España, Francia, Portugal y Tánger, una ruta obligada para huir de la persecución a los judíos. Hay que dedicar tiempo y sosiego para disfrutarla porque se acumulan los detalles. Destacan las escenas cotidianas captadas en los puertos de Marsella y Oporto al igual que las escenas campesinas de su país. Las captó antes de marcharse y parece continuarlas en Francia. Su colección de Tánger llama especialmente la atención ya que, como él dice, allí se sintió libre para fotografiar lejos de una guerra. Después regresó a nuestro país, en el que murió hace 15 años. Fue el hombre que retrató la España más profunda, la más pobre y hambrienta de postguerra. Hombres y mujeres captados con sus herramientas de campo y viviendo sus tradiciones y fiestas populares. Sus imágenes dejan un legado fotoperiodístico único de la historia del país. Entre los rostros raídos por el sol del campo aparecen los de ilustres como Ortega y Gasset y Azorín entre otros, otra etapa de Muller. La última.
Con la exposición se celebra el centenario del nacimiento de Nicolás Muller. Se reivindica de alguna forma que Capa no fue el único fotógrafo húngaro destacado del siglo XX. Las reflexiones a las que invita las mastican muchos relajando el cuello y echando la mirada al techo mientras recorren las imágenes. El artesonado señorial del interior de La Lonja le da un empaque extra a lo que se está viendo y la inmediata certeza de que uno no está ante la obra de un cualquiera.
Bonadies, Caula, Schapiro y Bergera
El Centro de Historias es uno de los espacios más prolíficos y activos de Zaragoza. Allí se expone Cartografías de un territorio compartido, una muestra conjunta de Ángela Bonadies y Tito Caula que se puede visitar hasta el 16 agosto. En el mismo centro Steve Schapiro muestra Retrospectiva hasta el 23 agosto. En esta exposición el cine es el protagonista absoluto.
El curioso recorrido de gasolineras abandonadas de Iñaki Bergera lleva por título Twenty Six (Abandoned) Gasoline Stations. El vasco es profesor de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Zaragoza y hasta el 17 de julio muestra su trabajo en la Galería Carolina Rojo (calle Paseo Sagasta 72).