Hora punta, calles repletas y mucho hambre. Un olor que viaja directamente al cerebro y el instinto se encarga de arrastrar tus pies hacia ese puesto de comida callejera en el que es muy difícil elegir. Puede que en España no sea un acontecimiento tan cotidiano pero el comer en la calle va ocupando su espacio. Somos un país de sentarse a la mesa pero todo se pega, más si viene de Estados Unidos. Así el street food va tomando forma, de furgoneta principalmente, en nuestras calles.
Los sabores siempre han sido imprescindibles para conocer cualquier cultura y los viajes suelen estar marcados por un dejarse llevar hacia platos insólitos. Platos que tiñen con su aroma los rincones de cada calle mostrando la gastronomía local. Pero no todos los países mantienen la tradición de comer en la calle, no sólo por costumbre sino, como en el caso de España, por la regulación. Las clásicas furgonetas sólo pueden instalarse fuera de conciertos, en eventos deportivos, mercadillos o recintos feriales. Por algo el bocata es lo primero que se nos viene a la cabeza, tras él los helados, y, actualmente, es en los mercados donde suele encontrarse.
Estados Unidos
El street food ‘premium’ es el de Estados Unidos, sólo en la ciudad de nueva York suman 3.000 puestos callejeros de comida entre los que incluso se organizan premios como los Vendy que, a modo de Estrella Michelín, galardonan a los mejores vendedores ambulantes; a esos ‘foodtruck’ que además de ofrecer calidad cuenta con la posibilidad de moverse en cada momento a las zonas con más clientes. Y como todo han de llevarlo a la televisión cuentan con el programa Comida sobre ruedas donde van probando cada plato, normalmente hamburguesas y perritos.
Europa
La costumbre impone comer en casa, con tranquilidad, degustando un plato elaborado. Pero la realidad es que es muy fácil encontrar puestos de comida en las calles aunque con estilo propio; la venta suele realizarse en las ventanas de los propios establecimientos o en puestos fijos en parques o mercados. Y es también la tradición la que marca los platos, suelen ser los más representativos de la zona. Por ello es fácil encontrar crepes y quiches en Francia, pizzas (en forma cuadrada) en Italia, pastelitos en Portugal, salchichas o pretsels en Alemania… mientras que en el resto de países lo más fácil si decides comer en la calle es apostar por sándwiches o patatas fritas.
Asia
Precisamente la comida asiática es la que más se expande siendo muy fácil de encontrar en los puestos de cualquier lugar. Lo más común es que los alimentos se vendan fritos, ya sea arroz, fideos, gambas o pollo aunque existen grandes diferencias según la región siendo India uno de los puntos de referencia por sus especias y vegetales. Ante un puesto de comida ambulante en Asia es bastante difícil escoger, ya sea por el desconocimiento de algunos alimentos o por el temor a sabores demasiado diferentes. Hay que probarlo todo.
La gastronomía es una oportunidad para descubrir un país, más si es posible hacerlo desde sus calles. El street food es tendencia porque, por un bajo precio, permite degustarlo mientras el resto de sentidos se dejan llevar por recónditos edificios, colores desconocidos, sonidos de otros mundos…
Fotos: nils gore (cc) / ElvertBarnes (cc) / Shapphireblue (cc) / Flip Nomad (cc)
