Madrid. Un martes cualquiera a las 08:30 am. Apuras el café y te preparas para salir de casa dirección al trabajo. En el camino hacia el metro, después, cuando sales de la estación en tu lugar de destino, al girar la esquina del kiosco donde compras la prensa, bajando la calle en la que finalmente cruzarás un portal y comenzará tu jornada laboral. ¿Te has fijado? Estaba ahí. Solo tendrías que haber levantado la vista del suelo. Absorto en tus preocupaciones, en el día que te espera entre las cuatro paredes de tu oficina, de tu tienda, de tu pequeña prisión de ocho horas laborables, no te has fijado en el arte urbano que se expone en los muros y fachadas de las vías madrileñas. Obras de arte ajenas a museos, horarios, taquillas, comisarios…
Guillermo de la Madrid, una de las mentes creadoras de Madrid Street Art Project, lo explica de esta manera: “La filosofía del street art es el contacto directo entre arte y artistas (urbanos en este caso) con los espectadores. Arte, cultura, a la puerta de casa, camino del trabajo, en tus paseos de ocio, con cero filtros y con la posibilidad de que el espectador establezca su propio criterio”. Guillermo y Diana Prieto son los responsables de Madrid Street Art Project (MSAP), una iniciativa que nace en el verano de 2012 como, y según reza su manifiesto, una vía para promocionar, difundir y celebrar el arte urbano de Madrid. Los dos son unos apasionados del arte y la cultura en general y del arte urbano en particular. Él es documentador del arte urbano madrileño (Escrito en la pared) y profesor, ella, historiadora del arte y gestora cultural. Otro proyecto también relacionado con el street art, Gráfika (por favor, no os perdáis este vídeo), hizo que se conocieran y a partir de ahí surgió todo, como ambos cuentan en esta entrevista intervenida para Nokton.
Nokton Magazine: Dice Antoni Muntadas que «la percepción requiere participación», ¿pero qué diferencias de percepción existen entre el arte del museo y el que se encuentra en la calle?, ¿la participación del visitante ‘callejero’ es también distinta?
MSAP: A pesar de los intentos de las instituciones museísticas por mejorar, en el subconsciente colectivo todos asociamos el museo como templo del arte, incluso como se dice: museo como mausoleo. Es por tanto que se percibe como un lugar estático, en el que la contemplación es pasiva. En la calle sucede todo lo contrario. Como dice Muntadas, no solo se mira y se ve arte urbano, sino que se percibe, es decir, nos implicamos ante él, opinamos sin reparo, nos sentimos a su altura y por tanto no nos da miedo involucrarnos y sentirnos partícipes con total naturalidad.
NM: Estar fuera del circuito convencional y comercial le da al arte urbano ciertas connotaciones de libertad y espontaneidad, ¿el mismo corazón de E1000 en la pared de un museo tendría otro sentido?
MSAP: Sin duda no sería lo mismo, tendría otras connotaciones que cambiarían su concepción y su percepción. Una intervención en el espacio público, sin permiso, espontánea y llevada a cabo por la propia iniciativa personal del artista no está sujeta a los más comunes condicionantes del arte, digamos convencional, como son la opinión de críticos, galeristas, instituciones, coleccionistas… En MSAP consideramos que el arte urbano es una expresión artística más personal y que el mero hecho de actuar en la calle conlleva un posicionamiento respecto a la sociedad, la cultura de compromiso y la concepción del espacio urbano como algo realmente público.
NM: En cuanto a la huella del street art en el espacio público, ¿cómo se complementan la arquitectura de la ciudad y el arte urbano?
MSAP: El arte urbano de una ciudad viene condicionado por los espacios que le son ‘proporcionados’ por ella, pero al mismo tiempo muchas de las intervenciones que vemos se adaptan a esos espacios, respetando e integrando sus características, sus texturas, su historia e incluso su significado. Para MSAP, el arte urbano adquiere un valor especial cuando toma esa postura de respeto, integración y adaptación al espacio urbano.
NM: Uno de los platos fuertes de Madrid Street Art Project son los Safaris Urbanos, paseos por Madrid en los que los grupos que solicitan una visita guiada (el precio es de 5 euros) descubren el arte urbano en los rincones más insospechados de barrios como Lavapiés y Malasaña. En vuestra opinión, ¿a qué nivel se encuentra Madrid respecto a las grandes capitales europeas del street art como Berlín o Londres? ¿Es esta ciudad un referente de arte urbano en España?
MSAP: Madrid es una ciudad peculiar respecto al arte urbano, hay una gran ‘escena’ en activo, pequeñas intervenciones a diario, mucha gente haciendo cosas, pensando, colaborando entre ellos, gente de fuera que pasa por la ciudad y deja su sello… Sin embargo, es una actividad -incomprensiblemente- muy perseguida por las autoridades. Hay quien dice que Madrid tiene un tono gris, refiriéndose al color de la pintura que el ayuntamiento utiliza para tapar los muros de la ciudad una y otra vez. Esto hace que no abunden los grandes murales, y que la mayoría de intervenciones sean veloces, ingeniosas, discretas…
NM: Otro de vuestros propósitos es acercar el arte, en concreto el arte urbano, a los jóvenes de educación secundaria y de bachillerato, por lo que planteáis una serie de propuestas adaptadas a las instituciones y a su dinámica. ¿Cómo viven el encuentro con el street art los chavales?
MSAP: Por supuesto, como buenos adolescentes, en principio se muestran distantes y entusiastas, todo a la vez, jeje… En serio, para los chavales es una aproximación al arte en la que lo sienten como algo cercano a ellos, perciben un lenguaje y un espacio que les es familiar, unos códigos que en parte conocen y reconocen y en parte descubren por primera vez. La lástima es la coyuntura actual. Muchos centros educativos nos contactan interesados por estas iniciativas; sin embargo todos tienen dificultades económicas, con lo que a veces nos resulta complicado poder organizar una actividad con la suficiente calidad.
Dice Guillermo de la Madrid que en MSAP cada uno tiene sus preferencias en cuanto a artistas urbanos, tan lógicamente personales como felizmente variadas. No quiere arriesgarse a comentar las suyas por una sencilla razón: prefiere no condicionar a nadie, quiere dejar que cada uno se acerque y se enganche al street art a su manera, configurando, como él señala, “un universo personal con los artistas”. Desde este colectivo comprometido con el arte de la ciudad solo nos piden una cosa: levantar la vista del asfalto, abrir la mirada a lo que está sucediendo en los muros madrileños. Y si sales de Madrid buscando arte urbano Guillermo nos aconseja visitar Valencia, en concreto el barrio de Velluters, cerca del Carmen: “Por momentos el adentrarte en él puede producir ciertos reparos, pero está lleno de muros intervenidos constantemente”.
El próximo martes volverá a sonar el despertador. Te espera un Madrid intervenido, cuestionado, gratificante.
Los Safaris Urbanos de MSAP tienen un precio de 5€ por persona. Más información en este enlace.
Fotos cedidas por Madrid Street Art Project.