7 Pasos para escribir un buen microrrelato

Cómo escribir un microrrelato.
Cómo escribir un microrrelato.

Si has llegado aquí estamos seguras de que escribir es una de tus pasiones. Puede que ya la estés desarrollando y quieras perfeccionar tu técnica o que haya sido una de esas pasiones que vas dejando pasar y por fin ha llegado el momento de dedicarle tiempo. En cualquiera de los dos casos los microrrelatos estarán en tu mente. Si ya escribes porque sabes que es un formato que, por breve (nunca superará las mil palabras, y de hecho normalmente rondará las 300) genera muchos retos. Si eres de los segundos es un género ideal para comenzar precisamente por su corta extención. Te contamos algunos pasos para que empieces a escribir microrrelatos.

Pasos para escribir un buen microrrelato

La brevedad del microrrelato genera muchos adeptos tanto para escribirlos como para leerlos. Por ello el escritor de este formato se enfrenta a múltiples aspectos a resolver para que su texto genere interés y atracción en el lector. Y vamos a hablaros de ellos.

1.- Elegir el tipo de relato corto

Antes de sentarte a escribir es aconsejable definir la historia sobre la que vas a tratar. No todos los géneros utilizan los mismos recursos ni el mismo vocabulario. La situación que vas a plantear cambiará notablemente si se trata de un texto de amor, uno de terror, uno de misterio, uno erótico o uno de fantasía. Plantéate en qué género vas a adscribir tu texto antes de lanzarte a poner palabras sobre el papel.

2.- Piensa en el tema del que quieres hacer el relato

Una vez has dado el primer paso y tienes claro el género es el momento de pensar el tema. Si vas a hablar de amor no será lo mismo una historia de desamor, que la de un amor juvenil o que la de un personaje que descubre el amor en la vejez. Lo mismo en el resto de géneros. Por ejemplo si se trata de fantasía puedes contar una historia del bien frente al mal o algo mucho más cotidiano como un día en Marte. Como ves de cada género puedes extraer multitud de temas y solo tu serás capaz de encontrar el que realmente quieres narrar.

3.- Plantea la estructura de la historia

Por muy pocas palabras que requiera un microrrelato la estructura es igual de importante que la de una novela. Deberás encontrar el punto de partida de tu historia, hallar las situaciones por las que va a pasar el personaje (normalmente en un microrrelato serán pocas, incluso una sola escena) y encontrar un cierre a esa situación. Tener clara la estructura te permitirá comenzar a pensar las palabras.

4.- Piensa en lo que va a enganchar a tus lectores

Un microrrelato tiene que llamar la atención del lector con pocas palabras así que es muy importante que en él se transmita algún hecho que marque al lector, que le haga pensar, sentir, sufrir o sonreír. Puede tratarse de la propia situación, del personaje o incluso del escenario, pero se hace preciso encontrar un punto de inflexión que modifique la perspectiva de quien te lee.

5.- Hora de redactar y ponerlo todo “sobre el papel”

Ahora sí, es el momento de escribir. Toma el boli o el procesador de texto y comienza a poner palabras a tu historia. Como ya habrás supuesto estos formatos como el microrrelato no están enfocados a grandes descripciones o a historias que duren muchos años. Adapta tu estilo para narrar de forma amena y ágil.

6.- Piensa en el final y haz que sea inolvidable

El cierre de un microrrelato es fundamental. Aquí no se trata de descubrir que el personaje evoluciona o cómo ha ido cambiando una sociedad. Aquí se trata de poder jugar con las palabras y la estructura para que el final sea siempre sorprendente.

7.- Revisa y valida lo redactado

Una vez has dado por cerrado tu texto, guárdalo cerca, porque toca hacer correcciones. Normalmente se recomienda dejar reposar el texto una o dos semanas para volver a mirarlo con otros ojos y poder ser más exigentes en su corrección. Y no hablamos solo de una correción gramatical y ortográfica, que también, sino de una correción de estilo. Comprobar que todos los elementos tienen sentido, que las palabras son las adecuadas, que la historia fluye.

Dar un paso más, escribir un libro

Si te ha gustado la experiencia crear un microrrelato quizás te interesaría dar el salto y  aprender cómo escribir un libro. Es normal, cuando se adquiere la rutina de escribir el universo se abre y te ofrece multitud de opciones y de historias para seguir narrando. ¡Disfruta del proceso!