¿Sabes a qué suena tu cerveza?

A qué suena tu cerveza.
A qué suena tu cerveza.
SON Estrella Galicia nos ha enseñado que una cerveza se crea tal como se compone una canción.

Ante la pregunta de ¿a qué suena tu cerveza? es fácil dejarse llevar por ideas próximas al sonido del mar, cuando las olas rompen, contra la roca, tal como la espuma de la cerveza rompe en el vaso… u otras imágenes bucólicas. Pero vamos a ir mucho más allá, mucho más cerca de la realidad. Vamos a enfrentar una receta magistral a una partitura para profundizar en el propio proceso de creación que aúna a la vez música y cerveza.

Formar una banda es como crear una cerveza, cambiemos cada instrumento y la voz por una materia prima, ensayemos a hacerlo con constancia y obtendremos una creación única. Una banda pasa por diferentes fases; crear la música y la letra, grabar una maqueta, tocar en directo… y todas ellas son equiparables a crear el sabor de una cerveza.

Desde SON Estrella Galicia nos han propuesto indagar en este proceso a través de #aquésuenatucerveza, una experiencia que parte de la premisa de ¿qué comparten el proceso de elaboración de una cerveza con la composición de una canción? y que podrá disfrutarse en diferentes festivales como Atlantic Fest, Portamérica, Sinsal, WOS, Mira Digital Arts, y Purple Weekend.

Taller #aquesuenatucerveza
Taller #aquesuenatucerveza

Para la presentación de esta experiencia que ha tenido lugar en Madrid antes de lanzarse a la gira festivalera han contado con el grupo Mister Marshall que ha puesto el sonido a este didáctico taller de música y cerveza. Al sentarnos en su mesa llega el primer consejo, hay que sentirlo como si de un ambiente festivalero se tratase. Hay que sentirse público musiquero porque es este y los propios músicos los que más se relacionan con la cerveza.

El taller aporta una interesante aproximación a estos procesos dividiéndolo en bloques según materias primas y procesos de elaboración. Comenzamos con los ritmos de la batería que como base pueden equipararse al agua para la receta de cerveza. Un agua blanda sería la batería elegante y discreta.

Continúan unos rifs de guitarra, en concreto tres tipos de sonido que transmiten lo mismo que los tres tipos de malta que van oliendo los participantes en el taller para extraer tras ese aroma el de la propia cerveza. Y es ahí donde batería y guitarra se unen.

Después llegará el bajo para equilibrar la canción y con él el lúpulo para equilibrar el sabor. Y como cierre la voz que se transforma en levadura en la mesa. En conjunto un interesante análisis sobre la propia creación y sobre cómo música y cerveza tienen en común mucho más de lo que ya sabíamos, que no era poco. Un taller que en un ambiente festivalero, solo puede ganar en propiedades culinarias y sonoras.