Ivonna Buenrostro es el nombre tras Heart beats club, esta ilustradora mexicana plasma su particular visión de personajes de películas y series que le han ido marcando, dibujos llenos de colores vivos, con unos trazos donde los detalles no dejan lugar a equívocos sobre lo que quire transmitir. Tumblr, Facebook e Instagram son sus galerías de trabajo, donde podemos ver desde la Uma Thurman de Kill Bill a Léa Seydoux en La vida de Adèle, pasando por los protagonista de Viaje a Darjeeling o la niña surcoreana de uno de los últimos filmes de la temporada: Okja. Icónicas cintas que no pueden pasar desapercibidos para los amantes del cine independiente como Olvídate de mí, Amélie o la última de Spike Jonza antes de hacerse realizador de los directos de Frank Ocean, Her, donde Joaquin Phoenix se enamora de un sistema operativo similar a Siri con la voz de Scarlett Johansson.
Ha participado en uno de los libros de ilustración que hay dedicados a Wes Anderson, Bad Dads, y hace unos meses formó parte de una expo colectiva en Nueva York sobre la figura de David Lynch con sus ilustraciones sobre Twin Peaks. La muestra fue a cargo de Spoke Art, una galería de arte que también funciona online y donde podemos encontrar auténticas maravillas.
«Busco muchas fotografías de referencia, aunque muchas veces termino usando solo una, las guardo porque con las otras imágenes compongo lo que será el personaje, me gusta cómo se ve el cabello en esa, las sombras en ésta, y así sucesivamente. Para la elaboración hago un boceto a lápiz mirando las imágenes, lo escaneo y coloreo en photoshop y después lo transformo en formato 100% digital», relata Ivonna en su Tumblr.
Dale al play
Tras bucear por el universo del Heart Bets club lo que apetece es revisionar la primera temporada de Stranger things para volver a delitarnos con Eleven, viajar a través de Wes Anderson en Moonrise Kingdom y Viaje a Darjeeling, querer adoptar al gato de Inside Llewyn Davis, sentir un atisbo del deseo de La vida de Adèle, salir clandestinamente con tu amante como en Carol, sentir la rabia de la prota de The girl with the dragon tattoo, grabar pelis cutres con tu amigo del alma en el insti a lo Yo, él y Raquel o borrar a tu maldito ex de la memoria como hacía Clementine Kruczynski en Olvídate de mí, hay películas que nunca deberían pasar al olvido, y algunas de estas esperamos que no lo hagan jamás.