Entrevista a Elena Romea #JefazaAlHabla

Elena Romea.
Elena Romea.
Escritora, investigadora, articulista... Elena Romea es una de las personas más activas dentro del panorama fantástico.

Escritora, investigadora, articulista… Elena Romea es una de las personas más activas dentro del panorama fantástico. Desde su portal Spanish Fear da a conocer a diferentes autores del género a la vez que realiza reseñas sobre las últimas novedades de terror. Aprovechamos la publicación de su primera novela y zambullimos en el Elenaverso. 

Nokton Magazine: Antes que nada, hay que decir que eres una persona bastante multidisciplinar… ¿Cómo lo haces para organizarte?

Elena Romea: Pues como gran maniática que soy tengo mi agenda a día vista donde voy apuntando todo al detalle, una pizarra donde pongo el planning semanal en la pared y un calendario mensual junto a esta. Pero luego me come el tiempo o cosas no planeadas y todo lo que no sea trabajo o cosa inamovible baila.  Es todo muy caos. Lo que no es trabajo trabajo siempre va con retraso… 

NM: La figura de Justina es fascinante, ¿cómo surgió este proyecto?

ER: Siempre he escrito, desde pequeña me gustaba inventar historias y las iba guardando. Ya de adulta me presentaba a muchos concursos literarios. Años y años pero nunca gané nada de ficción. Una decepción, de adolescente y joven adulta me enfadaba mucho – tengo así como un mal pronto.  Luego ya he ido aceptando que muchas de las cosas que escribo no son muy buenas. Cuando me mudé tiré todos mi cuadernos con cuentos, poemas, etc. Ahora me arrepiento. Yo como soy muy cabezona seguí haciendo cosas,  pero nunca eran seleccionadas, ni ganadoras. Durante el confinamiento – que estaba que me subía por las paredes de mi casa de 30 metros cuadrados- me vine muy muy arriba, decidí coger mis escritos perdedores y darles un marco. Pensé en hacer un fanzine. Se lo mandé al editor de 2 Cabezas y me dijo que los relatos estaban muy bien… pero el marco era una mierda. Dándole vueltas me inventé a esta señora, y su situación, que era bastante parecida a la mía. Me sirvió de vía de escape, porque yo soy una paciente de dolor crónico que fue a peor estando cuatro meses en casa sin rehabilitación y sin poder hacer deporte. Justina fue mi única salida cuerda. Me lo pasé genial imaginandomela. Al releer las cosas que había escrito vi que tenían ciertos elementos comunes, cosa que además me había dicho el editor, y que mejor que adaptar todo a una monografía distópica. 

NM: ¿Cómo se te ocurrió la idea de Spanish Fear?¿Cuál ha sido tu experiencia?

ER: Empezaré desde el principio. Hace más de 10 años tuve que hacer de intérprete en una entrevista telefónica a Paul Naschy. Una emisora americana -que no puedo nombrar- me pidió el favor porque no tenían a nadie. Yo los conocía de unos foros de internet y acepté. De aquello salió una colaboración de varios años en los que yo les hacía un programa semanal de fantaterror y giallo con música, etc. No cobraba nada pero era divertido. La historia es que esta gente resultaron ser unos homófobos, racistas y muy salidos. Eran un padre y una hija de California, que no paraban de pedirme fotos picantes para hacer un calendario erótico festivo. Yo me negué. Tras esto se metieron a hacer porno  y  pretendían que yo aportase mi granito de arena. Dije que no y me echaron, con amenazas y todo. La historia es bastante divertida y da para una novela de terror, porque la hija además estaba celosísima. Solo eramos ella y yo en aquella emisora, el resto eran todos hombres. Hicieron el concurso de Miss XXXXX y gané yo, le dio un berrinche… decía que era en broma, pero aquello había que verlo. En otra ocasión uno de los presentadores de los otros programas que ponían me dijo que iba a ir a nosequé ciudad de México al mes siguiente, que si Madrid estaba cerca; otro me mandaba invitaciones a Skype para tener sexo virtual. Gente de calidad. 

Mi amigo el horror host Dr. Gangrene, tras esto, me animó a que creara mi propio podcast y de ahí surgió Horror Rises from Spain. Un podcast en inglés sobre Spanish Horror. Estamos hablando de hace unos 10 años. La cosa fue triunfando e incluso llegué a publicar en la revista Fangoria. Entonces un amigo me escribió y me dijo: “he visto que el dominio Spanishfear.com está libre. ¿Lo registramos para que puedas crear una web en inglés sobre terror español?”. Era una buena idea, original y divertida. Funcionó muy bien desde el primer momento la verdad, incluso he tenido temporadas con colaboradores. Luego se añadió el canal de youtube, discord, el podcast pasó a ser en español, etc. ¡Y hasta tengo sponsors!

Yo estoy muy contenta con el proyecto porque la verdad es que hay seguidores muy fieles, he conocido a gente muy interesante, puedo ser gamberra y pasarlo bien. Me cuesta bastante mantenerlo todo porque estoy sola… si alguien lee esto y quiere colaborar es más que bienvenido. 

NM: ¿Cuál es tu opinión del fandom español?

ER: Pues hay gente maravillosa que apoya muchos proyectos y luego está el típico fandom abuelo – de alma o de edad- obsesionado con las tetas, machista hasta la médula y maleducado que se piensa que sabe más que nadie. Hay mucho ego… y alguno que quiere que trabajes de gratis. Cuando salió Spanish Fear recibí un comentario de alguien que hacía unos años me pidió hacer algo así, pero obedeciendo, dándole todo mi tiempo y de manera gratuita para logro de su propia marca. Ya había hecho algún trabajo para esta persona y creo que una vez me dio 3 chapas a cambio. La gente tiene mucho morro.

Cuando he tenido proyectos de terror en común con mi pareja nunca me nombraban a mí. Por ejemplo, llevábamos un blog dedicado a Paul Naschy y cuando murió le pidieron unas palabras para una publicación a él, yo no contaba. Y como esas varias. Cuando escriben a Spanish fear, aunque me conozcan y sepan que lo llevo yo siempre usan el vosotros para hablarme, en los comentarios a los vídeos me dan lecciones de dónde poner la cámara, me dicen lo guapa que estoy, que que bien me sienta tan vestido, etc. 

Incluso me han llegado a hacer luz de gas o directamente me ignoran. 

Una vez dije feminismo en un vídeo y perdí 10 followers. 

NM: Te encuentras ahora mismo realizando un doctorado. ¿Qué opinas del mundo académico?

ER: El mundo académico es muy complejo. Tienes que trabajar mucho y muy duro. Hay gente maravillosa y proyectos muy interesantes. Todo siempre muy poco remunerado. La gente se sorprende pero en actividades académicas como publicar un artículo indexado o participar en un seminario has de pagar, entre 50 y 200 euros o más. Y son actividades obligatorias en la mayoría de programas de doctorado, además de ser más que recomendables para obtener puntos para plazas, etc. 

Solo añadiré que mi doctorado se resume en sangre, dolor y lágrimas. Muchas lágrimas. 

NM: ¿Puedes hablarnos de tu proyecto doctoral y la figura de José Val del Omar?

ER: Uff… pregunta compleja. Bueno, yo siempre cuento que fue en el Museo Reina Sofía de Madrid cuando conocí a Val del Omar y me inspiró. Hace unos años hice un TFM  sobre Val del Omar y quise continuar con ello en el doctorado. Es una figura muy interesante, fue el fotógrafo de las Misiones Pedagógicas y un místico cinematográfico. Él quería hacer ascender al público a la divinidad a través de la experiencia fílmica. Inventó muchas cosas como zooms, especies de home cinema, etc. para llevar esto acabo. No quiero contar mucho más, que aún no he defendido… pero podéis consultar en mi perfil de Dialnet artículos indexados que he escrito sobre él. Hace poco me entrevistaron en un podcast sobre él. 

NM: ¿Estás trabajando en algún proyecto literario ahora mismo?

ER: Ahora mismo estoy a tope de todo y no tengo mucho tiempo. Estoy pendiente de que me digan si han escogido un relato que mandé para una antología – no tiene nada que ver con lo que suelo escribir y tengo que admitir que me lo pasé muy bien trabajando en ello-, pronto saldrá un texto de Justina en una obra colectiva de 2 Cabezas… y bueno, tengo mucho dentro de la mente. Normalmente yo en la preproducción de un texto lo medito mucho, le doy mil vueltas en mi ser y luego ya lo llevo al ordenador. Me gustaría hacer algo de poesía, también tengo varias historias en la cabeza…