Alimentos de kilómetro 0 en casa

Alimentos de km 0.
Alimentos de km 0.
Si eres de los que vuelven del pueblo cargado de frutas y verduras quizás ya te has planteado disfrutar de alimentos km 0 en casa.

La vuelta de vacaciones trae maletas desordenadas, buenos propósitos para el nuevo curso, souvenirs difíciles de entender, y comida con sabor. Los que regresan del pueblo aprovechan para hacer acopio de verduras y frutas de las huertas familiares o de alimentos típicos adquiridos en esos paseos sin prisa que conllevan el verano.

Todos esos alimentos que continuarán dando felicidad aún en la vuelta a la rutina se caracterizan por ser de kilómetro 0, producidos o elaborados a poca distancia de donde se han adquirido y que normalmente llegan a la tienda pocas horas después de haberse recogido o fabricado. Pero este tipo de alimentación no tiene por qué estar alejada de las grandes ciudades e incluirla en nuestro día a día puede ser una gran opción ecológica y saludable.

Por qué consumir alimentos de kilómetro 0

Las ventajas de estos productos son variadas, por un lado encontramos las ecológicas. Basta pensar que al no haber sido transportados miles de kilómetros (normalmente se consideran de km 0 hasta los 100 km de distancia) el impacto medioambiental producido por el transporte es mucho menor al reducir las emisiones de CO2. Además manteniene activas especies de fruta o verdura locales.

Por otro lado la trazabilidad del producto es más fácil de conocer, en ocasiones incluso podemos visitar al productor, y así la posibilidad de asegurarnos de que la calidad y la frescura está intacta.

¿Y si el km 0 es tu casa?

Vale, es muy complicado que puedas producir de todo en tu casa. Incluso es complicado mantener una alimentación total de km 0 en determinadas ciudades o espacios en las que no es sencillo producir todo tipo de alimentos. Pero quizás puedes dar un paso para acercarte a ella.

Si has llegado hasta aquí puede que ya te hayas planteado montar tu propia huerta en casa, es una opción estupenda para tener siempre a mano tus productos o especias favoritas y solo necesitarás de un poco de mimo. También es posible que en tu zona exista alguna asociación vecinal que se encargue de traer y distribuir productos de kilómetro 0.

Además, aprovecha ese viaje al pueblo para que te transmitan las recetas más tradicionales y aprende así a hacer mermeladas, encurtir, o a embotar verduras o pescado, con esto no tienes porqué atiborrarte a esos productos de kilómetro cero para que no se estropeen.