Ante todo aceptar la organización de una fiesta es un gran reto. Al segundo de recibir la llamada la mente se va a qué outfit escoger, a quién invitar o dónde celebrarla. Si eres el invitado algo parecido, qué vestir, quién ira, ¿me pilla cerca? y después contar calderilla y calcular a la cuenta de la vieja en cuantas cervezas puede transformarse.
A la hora de preparar una fiesta cualquier mortal pensaría en qué bebida escoger, que música recibirá mejores críticas entre los asistentes y, si se ve sobrado de tiempo, alguna temática para el evento. Otros van mucho más allá, porque “la vida sin confeti no procede”.
Son palabras de Mario Vaquerizo que ante el reto de organizar una fiesta en 24horas opta por una gran opción, pedir ayuda. Lo hace llamando al 11888 donde sus Pelochos le atenderán dentro de la campaña Los retadores en la que también puedes proponer tu propio reto. El de Mario Vaquerizo parecía difícil, se espera mucho de un experto en fiestas, incluido que caiga un megatrón del techo o que los hielos no tengan forma de hielo sin olvidar que “unicornios, elfos, duendes y caballitos poni” son el indispensable para cualquier evento que se precie.