La compañía teatral Primas de Riesgo representará este mes en Madrid El mágico prodigioso, de Calderón de la Barca. Con ella, busca tender puentes entre la actualidad y el Barroco e invitar al espectador a una experiencia de transformación. Pero, además, la obra, íntegramente interpretada por mujeres, forma parte de una campaña pensada para que el público tome conciencia de las dificultades que atraviesa el teatro, que empieza en un lugar tan insólito como las páginas de una revista porno.
Según cálculos de la compañía transmitidos a Nokton Magazine, si se les aplicase el actual IVA cultural del 21%, el más alto de la zona euro, las entradas para El mágico prodigioso deberían venderse al público a 35€ para que el montaje resultara rentable. Pero en Primas de Riesgo saben que pocos espectadores están dispuestos a pagar ese dinero ahora, así que han tirado de ingenio para reducir el tipo impositivo que les afecta y, con él, el precio de las localidades, aprovechando una extraña ironía: las revistas pornográficas pagan mucho menos IVA en España que el teatro clásico, en concreto, un 4% .
Así, Primas de Riesgo ha emprendido una campaña, llamada revistasporno4%calderón21%, mediante la cual venderán lotes de revistas porno valorados en 16€, con los que regalarán una entrada para una de las funciones de El mágico prodigioso. Este proceso de venta constituirá, en realidad, un estudio de mercado, durante el cual medirán el impacto de la campaña mientras inician los trámites necesarios para convertir su empresa en una distribuidora legal de revistas porno. Sí, han leído bien: los responsables de Primas de Riesgo están dispuestos a transformarse en la primera distribuidora de pornografía que regala entradas para el teatro si a lo largo de la iniciativa no cambian las condiciones fiscales para la cultura. ¿A alguien le suenan esos anuncios del mercado negro que informan de que se vende boli y se regala entrada para concierto? Algo así, pero de manera legal y con fines reivindicativos.
Querían saber “qué pensaba el público”

Pese al eco conseguido mediante esta campaña y pese a la irritación de la industria cultural con el actual ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, esta iniciativa no solo pretende vender entradas o cabrear al ministro jienense. Busca, sobre todo, generar debate; apelar, como explica su directora, Karina Garativá “directamente al público”. Los profesionales de la cultura, explica, ya sabían desde hace tiempo que el IVA de una revista pornográfica es menor que el que ellos pagan, pero querían saber “qué pensaba el público al respecto”.
“Los mensajes que hemos recibido”, señala Garativá, “nos llevan a pensar que mucha gente no era consciente de esta realidad”. Y es que las reacciones no han tardado en llegar desde todos los rincones del mundo: Estados Unidos, Chile, Portugal y Alemania, entre otros países. La mayoría son de apoyo, pero también hay quien se manifiesta en contra y asegura que “la cultura no es relevante en estos momentos, que es un artículo de lujo reservado a quienes puedan pagarlo”, confiesa.
Para los artistas, asevera la directora de escena y productora, “lo rentable es conseguir la comunión con el público, y ése es un valor que todavía no tiene precio de mercado”. Por buscar esa comunión muchos hacen sacrificios, pero, como recuerda Garativá, “en ocasiones hay que detenerse y pensar mejor las cosas”. La responsable de Primas de Riesgo desarrolla una metáfora con la que intenta describir el panorama actual para el teatro y la cultura en general: “Imagínate que tuvieras al mejor equipo de fútbol de la historia y les llevaras al campo no a jugar, sino a limpiar el césped; algo así está pasando con el talento de excelentes artistas que tienen que dedicar grandes esfuerzos no a la creación, sino a salvar todos los obstáculos que encuentran a la hora de desarrollar su actividad”.
El IVA no es lo único; son muchas, a su juicio, las situaciones que dificultan el emprendimiento cultural desde hace tiempo. “No existe una legislación que comprenda la especificidad de lo que hacemos y la que hay está llena de contradicciones como la que señala la campaña”, asegura. Garativá habla de artistas, como los grandes bailarines españoles que se ven obligados a emigrar a lugares donde puedan desarrollarse, que “no necesitan millones de euros ni cuentas en Suiza”. “Lo único que necesitan son condiciones para desarrollar su trabajo dignamente, y éstas no se están dando”, lamenta.
La web de Primas de Riesgo explica que plantea este cambio de régimen –de compañía teatral a distribuidora de porno- para poder dedicarse “a una actividad que cuenta con respaldo por parte del gobierno y una fiscalidad que demuestra el claro interés en su desarrollo”, en una referencia llena de sarcasmo, esto último, a las revistas pornográficas. Pero, a pesar de todo, a Garativá le gustaría pensar que semejante desequilibrio entre los IVA de ambas actividades no es una declaración de principios, sino, más bien, un descuido. “Quiero creer que es una realidad que va a cambiar pronto, ojalá nuestra campaña sea útil en ese sentido”, desea.
Fotos cortesía de Primas de Riesgo.