Boyero: “el cine oriental tiene derecho a existir” (Historias que cuentan)

Y simplemente, hablar de cine...

 

Decir “escribo de cine” tiene dos significados, que el tema sobre el que escribes sea el cine o que lo haces muy bien. Sólo unos privilegiados unen los dos conceptos. Es el caso de  Oti Rodríguez Marchante (ABC), Carlos Boyero (El País), Enric González (El Mundo) y Toni García (El País). Havana 7 los reunió en el tercer encuentro de ‘Historias que cuentan’. Una velada dedicada al cine a través de sus periodistas, una velada que para el espectador casi suponía colarse un viernes noche en la conversación de unos amigos en cualquier bar o, en este caso, ver por un agujerito una de las cenas que comparten estos periodistas en cada festival al que acuden.

Fueron precisamente los festivales uno de los temas más comentados. Oti y Boyero no dudaban en que lo que te gusta está en tu videoteca, los festivales en ocasiones “se padecen”. Para el periodista de ABC al menos 12 de 35 películas de Cannes son obras maestras pero el crítico de El País le corregía “quien dice 12 dice 3”. Los festivales marcan el calendario de su trabajo y Toni García analizaba sus diferencias; “en Berlín si hay un fallo, como que se supere el aforo, cerrarían el festival, en cambio en Cannes sería una gran noticia”. La diferencia en el de Venecia la encuentra en el jefe de seguridad, un hombre que vivió en Barcelona y es gran fan de Chiquito de la Calzada.

Dando a entender que a cambio de cada gran sorpresa hay muchas películas malas surge el gran tema, el cine que no les gusta. Era Enric González el primero en desnudarse, “las películas de los festivales son muy artísticas pero yo no las entiendo”, “aclaro que soy muy fan del cine iraní y tailandés”, afirma con sorna, “parece que va a pasar algo, pero no pasa”. Le replica Boyero; “el cine oriental tiene derecho a existir”.

También hubo hueco para el fútbol, un tema que reconocen como recurrente en sus cenas durante estos festivales. Boyero se planteaba si es cierta esa frase argentina que asegura que “se puede cambiar de casa, de mujer, de amigos, pero nunca de equipo” y así la conversación gira hacia los periodistas deportivos. “Aciertan más en las apuestas sobre los Oscars que nosotros”.

Carlos Marañón, moderador del encuentro, planteaba una de las preguntas más imprescindibles ¿una crítica puede hacer que una película funcione?. La respuesta, un unánime “no”; a una película grande no se la va a afectar, aunque reconocían que sí pueden ayudar a una cinta sin promoción. Incluso que sus críticas pueden dar la vuelta en el lector “si no le ha gustado al gilipollas de Boyero es que es cojonuda”, afirmaba el propio crítico.

¿Cuales son las críticas de los críticos? Toni García dejaba claro que considera imprescindible que las entradas a las salas de cine reduzcan su precio a la mitad, tampoco parecía convencido de que se pueda disfrutar de una película en una tablet. Pero ser periodista de cine no implica dejar de comportarse como el resto del público. Ellos también se duermen y lo reconocen, “hay películas que si las duermes bien es mucho mejor que no dormirlas”, “en algunas dormir las minutos exactos hacen buena a la película” reconocía Oti.

Para cerrar la noche se exhibía el último trabajo de Borja Cobeaga (Pagafantas). El cortometraje, Democracia, ahondó en la realidad de este sistema a través de un cómico supuesto. El de una  empresa sin una sola baja ni defunción en su historia en la que el jefe se plantea que es necesario para unir al equipo votar quién debe morir, la mayoría parecen convencidos…

httpv://vimeo.com/67384406