Cuando el coche es una extensión de tus armarios

Algunas veces, en las calles, cuando se pasea de escaparate en escaparate, se puede oír a algunas personas del sexo masculino quejarse de la ropa. De sus precios y de la poca variedad que a veces hay en las tiendas. Muchas marcas se han dado cuenta ya de que la moda se ha de democratizar también entre chicos y chicas, pero, ¿qué pasa con los zapatos? En el caso de los hombres la variedad se limita a abiertos, cerrados, colores y material, en líneas generales. Para las mujeres, solamente empezar a aprender a conducir significa en muchos casos llevar unos zapatos distintos en una mochila. Eso de conducir con sandalias de pulsera y con tacón de diez centímetros o con las botas de suela gorda para el frío, además de dos pares de calcetines bien abrigados, es de nivel avanzado. Todo con la soltura felina que tendrías si llevaras el calzado perfecto que elegiría el mismísimo Fernando Alonso.

Y en ese momento comienza el maletero del coche de muchos chicas a convertirse en una extensión del armario, cajoneras, neceseres y demás habitáculos del hogar que guardan todo lo que necesitamos en el día a día. Y no es una simple cuestión de desorden o de rozar el síndrome de Diógenes, es que si necesitas un buen paquete de clínex, un caramelo de menta, un ibuprofeno o un par de medias, es posible que los encuentres en alguna guantera o en bolsillo de detrás del asiento del conductor. Porque la necesidad apremia en el momento más insospechado y siempre puede ayudar un abanico de buenos trucos en la manga (o en el coche). Con esta idea en la cabeza, porque a muchas y muchos les ha podido pasar nace SEAT Mii by Mango, una suerte de bolso de Mary Poppins que llegue contigo donde haga falta y en el que puedas encontrar y te sirva para solucionar cualquier caso de emergencias ante problemas del primer mundo.

 

Foto de Katie Tegtmeyer (cc)

Contenido patrocinado por Seat