“Lico tiene una perrosonalidad propia”, explica divertido Pablo Gómez, “chico para todo” de 34 años y creador de Blowearts, un proyecto de dibujo en forma de viñetas protagonizadas por un simpático bretón que resume con mucho acierto lo que significa vivir con un perro.
Cuando le preguntamos por sus aficiones nos habla del dibujo (“obvio, ¿no?”), de la música rock, de viajar, de comer y de hablar “por los codos”. “No son aficiones, son devociones, pero me encantan los bichitos y la naturaleza en general. Filosofar sobre la vida, plantearme dudas existenciales y pensar que siempre es posible un mundo mucho mejor. Disfrutar de mi gente, a la que adoro. Siempre llego tarde, soy muy malo calculando los tiempos, pero todo el mundo me lo perdona porque me rodeo de muy, muy, muy buenas personas”.
Divertidas, y con un toque “vitalista”, las viñetas que Pablo dibuja arrancan una sonrisa a la manada de ‘bloweristas’ que le siguen desde enero de 2013: más de 2.800 personas en Facebook. Para ellos, Pablo sólo tiene palabras de agradecimiento: “Cuando algún día te faltan las fuerzas, son los que te impulsan para coger el bolígrafo”.
Pero al que más agradecido está es a Lico, que se marchó hace ya más de dos años: “Fue un momento muy duro. Es la angustia de perder a un ser querido, que has criado, que te ha acompañado día tras día y que te ha dado amor incondicional. Todavía hoy sigue siendo difícil. Me planteé dejar de dibujarlo, me lo propuso la familia, para evitar el dolor. Pero al final decidí que la sonrisa había que mantenerla, que el proyecto merecía seguir. Y me alegro de haber tomado esa decisión”.
Nokton Magazine: En Nokton Magazine nos declaramos fans absolutas de Lico. Cuéntanos su historia.
Pablo Gómez: Lico fue un bretón. El día que decidí que me lanzaba a tener un perro en mi vida le pedí ayuda a un amigo. Él fue quien localizó a Lico en la clínica de un conocido suyo. Yo no tenía ni idea de qué raza era, y la verdad que me importaba poco… A partir de ahí, fui aprendiendo de este mundo perruno “de la pata” de Lico.
NM: ¿Te dedicas profesionalmente al dibujo?
PG: No, aunque sería un placer. Tengo esa ilusión, combinando proyectos míos con encargos de editoriales… Me gustaría vivir de algo que me apasiona. Por otro lado, soy autodidacta: mucho dibujo y muchas ganas. De hecho, parece ser (me va a matar mi madre) que ya de pequeño pasaba notas dibujadas por debajo de la puerta del baño.
NM: Publicas a diario (de lunes a viernes) una viñeta nueva. ¿Qué es más difícil: hacer el dibujo, o pensar una anécdota graciosa para ilustrarla?
PG: Bueno, aunque no lo creas, ¡ahora estoy relajado! (risas). Durante mucho tiempo publicaba también sábado y domingo. Ahora voy con más calma. Lo complicado es la imagen: me encanta dibujar y aunque no tuviera nada que decir, es coger un bolígrafo y ponerme a garabatear inconscientemente. Pero la idea… Ten en cuenta que Blowearts habla de cosas de perros, de su relación con los humanos, de cómo ve la vida un can… Trato de que Lico no se meta en política (se pondría pingandito de barro), es respetuoso y todo va en clave de humor. Siempre con un enfoque vitalista. Y cuando no tengo nada nuevo que contar, Lico, que tiene una “perrosonalidad” propia, me chiva algo.
NM:Tus dibujos casi siempre son en blanco y negro.
PG: Bueno, hay algunos en color. Cosas puntuales, campañas de concienciación, colaboraciones externas, los objetos de merchandising… Pero las viñetas diarias son en blanco y negro, sí. En principio es por razones prácticas. Trabajo y tengo que hacer las viñetas a deshoras y con prisas, por lo que necesito que sea un medio rápido. Además, me encanta el blanco y negro, a veces resulta más impactante.
NM: Vendes algunos productos, como tazas, con la imagen de Blowearts y Lico. ¿Qué otros proyectos tienes?
PG: Blowearts es un concepto muy amplio, abarca todas las líneas imaginables. Ya no sólo de materiales “promocionales” por decirlo de algún modo, si no también proyectos interactivos, editoriales… No hay barreras para Lico, tan sólo mi tiempo y el dinero. ¡Y ambas cosas espero solucionarlas algún día!
NM: Como Lico no hay ninguno, pero nos preguntamos si hay algún otro can que ocupe tu corazón. Si es así, ¿piensas incluirle en las viñetas?
PG: A día de hoy no hay un perrete compartiendo mis días, por muchos motivos. Tengo sobrinos perrunos, a los que adoro, perros en mi familia que me hacen recordarlo todo. Pero está el tema tiempo, el tema económico, el hueco dejado por Lico… Compartir tu vida con un perro es una gran responsabilidad y hay que saber cuándo es el momento adecuado para tomar tal decisión. Pero seguro ¡segurísimo! que llegará el momento, no lo dudes.
Fotos: Blowearts.