Galería Adhoc. Misha Bies Golas.
El verano es lo que tiene. Da igual lo bien que te lo montes o las veces que repases tu plan maestro, porque siempre hay un momento, posiblemente azuzado por las altas temperaturas, en el que vamos todos como pollo sin cabeza gritando «vacaciones» y sin saber muy bien dónde meternos.
En esta ciclogénesis vacacional aún sin diagnosticar, el españolito medio viaja de norte a sur de la península guiado por la agresividad de las ofertas hoteleras, convencido de que lo único que le pide el cuerpo es una hamaca en la playa y un mojito de fresa en la mano y sin acordarse ni remotamente del anteriormente conocido como turismo cultural.
Volviendo a la analogía de los pollos, no hemos venido aquí para debatir si fue antes el huevo o la gallina, porque lo cierto es que, en temporada alta, todos nos hemos acostumbrado a que los museos y los centros de arte bajen la guardia, y no digamos ya las ferias de arte, que parecen reservadas a esos pocos meses del año en los que el cerebro aún no se nos ha derretido.
O por lo menos así era hasta ahora. Parece que las ferias de arte proliferan de tal forma que sus responsables están abriendo nuevas vías en el calendario para alejarse en fechas de eventos de este tipo con mayor trayectoria. Con ArteSantander como referente, estas ferias emergentes ven en los meses de verano su momento de despuntar y florecer, y si lo hacen bien, hasta de conseguir aprovechar el turismo estacional como fuente de visitantes.
Y es que hay quien todavía tiene fe en que el género humano pueda reactivarse en vacaciones. Estas son algunas de las ferias de arte que podremos visitar durante el verano de 2015.
Entre las actividades culturales de la UIMP y la llegada a la Fundación Botín de la obra de Sol LeWitt, en Santander el plan de playa tiene este verano el complemento perfecto. Si a esto le añadimos la vigésima cuarta edición de la Feria Internacional de Arte Contemporáneo de Santander, ArteSantander’15, la capital cántabra se convierte en uno de los mejores destinos para quien quiere el combo completo.
Bajo el modelo Solo Projects (un artista participante por galería), la feria más veterana del verano defiende su accesibilidad con propuestas como Curator’s Talk, un programa de conversaciones en formato entrevista con cuatro agentes del mundo del arte, así como manteniendo la entrada gratuita.
En su segunda edición, que se celebra desde el 22 de julio en el Palacio de Congresos Kursaal de Donosti, los responsables de DonostiArtean Art Fair se han decidido a duplicar las cifras del año pasado (10.000 visitantes). Para ello contarán con la participación de 17 galerías nacionales e internacionales, además de cinco espacios expositivos reservados a las propuestas artísticas individuales de Project Room y una zona dedicada a libros de artistas.
La feria donostiarra coincide en fechas y ubicación con Jazzaldia y toda esta profusión de arte nos recuerda que Donosti será Capital Europea de la Cultural en 2016.
Puede que la Costa del Sol sea el lugar del mundo con más sombrillas por metro cuadrado. Pero como ya sabemos lo injustas que son las famas, solo de pensar en la próxima edición de su primera feria internacional de arte se nos sube el moreno de alegría. Art Marbella se estrenará el 30 de julio en el Palacio de Ferias, Congresos y Exposiciones de Marbella y, auspiciada por el empresario argentino Alejandro Zaia, cofundador de las ferias Pinta en Londres y Nueva York, promete reunir al starlite del arte contemporáneo.
Se espera, entre otros, al comisario portugués Bruno Leitao, que dará buena cuenta de la escena artística portuguesa y madrileña, y al artista francés de origen húngaro Nicolas Schöffer, considerado el padre del arte cibernético y a quien se rendirá homenaje en esta primera edición.
El templo de la fiesta también ha decidido ampliar su oferta de ocio. Habrá que esperar un poco más, hasta el 3 de septiembre, para la primera edición de Art Ibiza 2015 en el Recinto Ferial de la ciudad.
El evento, que contará con 50 expositores nacionales e internacionales seleccionados por la comisaria Rose Marie Bellemur, tendrá además una parte dedicada al diseño contemporáneo y otra reservada a la arquitectura y promete ser lo más excitante y vanguardista que se ha visto en la isla en mucho tiempo.
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