Los Últimos Bañistas: “La importancia que le dan al tiempo en las noticias es un sinsentido”

Los Últimos Bañistas: “La cantidad de espacio que dan al tiempo en la tele es un sinsentido”
Los Últimos Bañistas, en el camerino de la sala El Sol. Foto de Jero Romero.
La banda de Murcia (con presencia gallega) estrena trabajo, ‘Expedición’, y han vuelto a hacer lo que les ha dado la gana.

“Los últimos bañistas quieren disfrutar del agua una vez más, en algarabía inacabable”, dice un poema de Manuel Vilas. De él toman su nombre Los Últimos Bañistas, la banda que este sábado se subirá al escenario de La Casa con Ruedas de Daimiel, Ciudad Real, donde estarán presentando su segundo trabajo, el recién salido del horno Expedición (Son buenos!, 2015), dentro del ciclo LCR Live.

Los Últimos Bañistas: “La cantidad de espacio que dan al tiempo en la tele es un sinsentido”
La formación con su anterior batería.

Expedición llega cuatro años después de la promesa sembrada por su debut homónimo, editado por Ernie Records, que sentó las bases del pop dulce y luminoso que continúa adelante en este último trabajo, que también se adentra en nuevos terrenos, con desarrollos inspirados en la psicodelia y lo progresivo, como el de ‘A través de las ondas’, el tema de seis minutos de duración que cierra el álbum, por los que el grupo murciano espera transitar en los directos de este año.

Pese la imagen melancólica de los últimos días del verano que a muchos puedan sugerir a los versos de Vilas, Los Últimos Bañistas (Manuel Gil, Álvaro Caballero, Nando Besada, Alex Dumdaca y Antonio Viwe) se fijaron en ellos más bien por esa especie de valentía que subyace entre líneas; por ese espíritu, como describe Caballero -su guitarrista, con quien ha hablado Nokton Magazine– que apuesta por “aprovechar hasta el último momento y disfrutarlo, ser los últimos en marcharse”.

Nokton Magazine: Sin embargo, también os definen como melancólicos, un sentimiento que queda plasmado en vuestro videoclip, ‘Expedición’, lleno de objetos vintage…

Álvaro Caballero: Sí que puede que haya cierto toque de nostalgia en alguna de las canciones. Si me tengo que referir a la música, te daría como ejemplo una canción en la que la nostalgia reina, que es ‘Vuelvo a recordar’, incluida en este último álbum, en la que Manu, al ser gallego y vivir en Murcia, hace uso de la famosa morriña, al rememorar el ambiente tan distinto en el que vivía, porque, además, él vivía en un pueblo entre montañas.

NM: En las canciones de Expedición aparecen varias veces palabras como jungla o bestias peludas. ¿Es que notáis el ambiente un poco asilvestrado últimamente?

AC: Hombre, pues sí, la verdad; aparte de nuestro gusto por los animales, también podemos comparar lo que está ocurriendo con una jungla, y comparar a ciertos personajes con bestias peludas. Como anécdota, esas dos palabras las utiliza mucho Manu; las ha sacado de letras de Mucho Muchacho, que no tiene nada que ver con nosotros  (se ríe), pero como referencia en las letras sí puede estar. La inspiración te llega de cualquier sitio.

NM: En Expedición habéis querido incorporar la experiencia del directo. ¿Qué habéis hecho a nivel de producción y de composición para conseguirlo?

AC: Es porque nosotros, en algunos directos, tendemos a alargar partes de canciones, haciendo partes instrumentales que van creciendo, que van evolucionando hasta que sufren una apoteosis. Esto, por ejemplo, queda patente en canciones como ‘A través de las ondas’, en la que el desarrollo real será de unos tres minutos y, sin embargo, la canción dura hasta seis minutos, siendo muy parecida a la que hemos hecho en directo. El tema va evolucionando hasta que todo se conjuga al final. A todos nos gusta la psicodelia y los grupos clásicos, sobre todo a Nando y a Antonio, a los que les encantan los Doors y siempre están apretando.

NM: Es también una forma de recuperar las canciones largas, ahora que parece que todas tienen que durar tres minutos y medio…

AC: En ese sentido, nosotros somos muy libres; en el disco hay una canción de seis minutos y, por el contrario, hay otra que dura un minuto y medio. Estilísticamente, algunas son muy diferentes de otras… Hemos hecho lo que hemos querido , hemos escogido las que más nos gustaban y ya está.

Los Últimos Bañistas: “La cantidad de espacio que dan al tiempo en la tele es un sinsentido”

NM: Decís que Expedición ha sido compuesto “en la distancia”. ¿A qué os referís?

AC: A finales de 2012, Manuel se fue a Galicia, y ha estado allí un par de años. Hay canciones en el disco que ya tocábamos antes de que esto sucediera, otras que ya habíamos maquetado… pero el grueso del disco y los arreglos se ha hecho en la distancia. Con nosotros en Murcia enviándonos archivos de audio, maquetando las canciones en el ordenador cada uno desde su casa. Los de Cartagena sí nos juntábamos para probar ideas en el local de ensayo, pero siempre con el hándicap de que no estaba el cantante y era un poquito diferente. Estábamos cada uno en una punta del país.

NM: ¿Es difícil?

AC: Nos hemos ayudado de las nuevas tecnologías a tope: un Gmail exclusivo para la composición del disco en el que no sé decirte el número de correos que cruzamos. La verdad es que nosotros siempre habíamos sido un grupo de ensayo, de estar mucho juntos, y cambiar esa dinámica nos costó mucho trabajo. También es como una relación a distancia: hay días que tienes más ganas, otros que menos, y al final, si no te haces el fuerte no te animas a seguir.

NM: En la letra de ‘Dinero’ decís: Si te entrego mi voz no es por amor, es por dinero. ¿Os han ofrecido algo por dinero que hayáis rechazado por amor?

AC: La verdad es que no nos ha surgido ninguna proposición de este tipo. Cuando hemos dicho que sí a algo ha sido por amor… y porque también acompañaba el dinero. También hemos hecho cosas, como todo el mundo, por ayudar a una causa o simplemente porque la ocasión lo merecía. Pero no han llegado Los 40 y nos han dicho “oye, mira, te vamos a dar tanto dinero y tal y cual”… pues no, mira, eso ya, si algún día llama a nuestra puerta y decidimos, es otra cosa, pero de momento no nos ha pasado.

NM: También contáis que Expedición habla de las tradiciones -ese “vicio eterno”, cantáis en ‘El favor de la duda’- inútiles. ¿Algún ejemplo de tradiciones inútiles?

AC: Pues… ninguno en concreto. La verdad es que ahora mismo en España hay tantas tradiciones que no sirven para nada y que son inútiles y que molestan a tanta gente que no sabría decirte una. Pero un ejemplo súper común y en el que mucha gente está de acuerdo conmigo son las corridas de toros, no se me ocurre cosa más inútil que esa y que se perpetúa y que sigue igual que en el siglo XIX

NM: Ya que hemos hablado de los últimos bañistas y los últimos días de playa y que en Expedición también habláis del control de los medios de comunicación… hace tiempo que nos preguntamos por qué en la televisión cada vez dedican más espacio al tiempo ¿Por qué piensas que es? No le vemos explicación

AC: (Se ríe) La verdad es que yo tampoco. Y mira que el tiempo en Antena 3 parece más un magacín que una sección. No sé, yo creo que emprendió la marcha Antena 3 con el tipo éste que es bastante peculiar (Roberto Brasero). Han visto que funcionaba y todos los demás se están apuntando a esa moda.

Es un poco un sinsentido. La información cada vez está más sesgada y es cada vez más partidista, y a veces, sobre lo que más incide es sobre lo que más te aliena. Por ejemplo, los telediarios dedican mogollón de tiempo a los deportes, pero no a los deportes, sino en concreto al fútbol y a sus cruces de declaraciones. Son cosas que no deberían estar en la media hora que dura un telediario. No sé, no tengo yo la solución, pero me parece que por ahí no está el camino.

(El poema de Vilas que inspiró el nombre del grupo, incluido en Amor. Poesía reunida (Visor, 2010) concluye así: «Uno de entre ellos, el último bañista, me mira / con su trono abierto, con el tiempo en una mano. / Oh, serenidad, concede a este muchacho lo que concediste / al necio: fervor y pocas preguntas, / fervor y un cuerpo con dinero, / flotando sobre el dibujo de la vida».)

Los Últimos Bañistas actuarán este sábado 28 de febrero en La Casa con Ruedas de Daimiel (Ciudad Real). Las entradas cuestan 7€ en venta anticipada y pueden adquirirse aquí. En marzo estarán en Santiago de Compostela (jueves 19, sala Moon), Vigo (viernes 20, La Fábrica de Chocolate) y en Murcia (jueves 26, 12 y medio). Puedes seguir a Los Últimos Bañistas en Twitter, Facebook y Spotify.